Gatitos muertos (*)
Cómo tan sólo un soplo de vida,
Su tibieza de espuma,
Ahuecaban mis manos,
Llenas de ternura...
Y fue un relámpago húmedo,
En un instante erróneo,
Casi insignificante,
Que arrebató sus latidos.
Y fue la tierra que abrió sus fauces
Extinguiendo la vida,
Extinguiendo la espuma;
Y cobijó en su seno,
Toda aquella ternura.
Y son seis lágrimas,
Como seis hojas que el viento quitó a la rama.
Seis lágrimas de mis ojos
Que antes de ver, así se hubieran sellado.
Y mis manos vacías,
Tan vacías y frías...
¿Por qué?
¿Quién pudo
Esparcir tanta muerte
Incoherente?
¿Quién pudo
Trocar mi amor en odio
Impotente?
¿Quién abrió este agujero en la nada
Que no alcanza para ocultar tanto dolor?
¿Quien pudo
Arrebatar de mis manos
Toda aquella ternura.
Mis manos vacías
Tan vacías y frías...
¿Qué haré con estas manos?
Oh, Dios, ¿Qué haré con estas manos?.
Felisa Bastek
O'Higgins (Bs. As. Argentina)*
(6 gatitos que rescaté del regazo de su madre envenenada.
Los amamanté con un gotero.
Hasta que salieron a conocer el mundo que los rodeaba.
Encontraron su muerte a manos de un "amable" vecino.
¡Los mató a palazos dejando sus cadáveres destrozados,
desparramados en el patio!
Eso fue hace más de 15 años, el vecino murió y sólo lo recordamos por esto, no
dejó familia, propiedades ni herencia, sólo este oscuro recuerdo)
